Leer un libro es viajar a otra dimensión, donde me dejo envolver por cada letra hasta que las frases construyen lo que me quieren mostrar. Más de una vez me he enamorado entre líneas de un personaje y más de una vez he llorado por terminar las páginas de ese amor.
Adoro los días lluviosos, donde me siento con mi libro para que me cuente su historia, tomar el té y escuchar música clásica, mientras mi mente se eleva atreves de sus palabras. También amo las noches de luna llena, porque los libros me hablan de amor, entrega y pasión, aunque hay días donde me cuentan el dolor de perder a un ser amado.
Me apasiona leer y aun mas tener a mis libros como compañeros a donde quiera que voy. Cuando leo no solo viajo a otros lugares y conozco cosas nuevas, también pasa algo mágico y es que el tiempo se detiene en esos fragmentos de mi historia.
